DESAYUNO
CON CHURROS QUE NO CON DIAMANTES
In
the morning, no me despertó una angelical y cinematográfica Audry Hepburn
contemplando mi naranja tienda Marmot como si fuese el escaparate de Tifany y
yo el más preciado y caro diamante. Fue un murmullo lejano y la claridad del
alba, las que me arrancaron del mundo en off en el que me encontraba meciéndome
placidamente, después de la imprevista Berrea nocturna.
Sinceramente,
sin una caliente excusa de domingo en el saco para remolonear tierna y golosamente,
era absurdo quedarse en tan
claustrofóbico y minimalista espacio. Por lo que salí al exterior con renovadas
energías y con ganas de comerme algo más que el mundo.
El
desayuno no se hizo esperar y llegó en Buggy
cargado de reponedores churros.
A cuentagotas y al olor de estos, los
militantes de esta LMR2013, fueron saliendo de
sus madrigueras en busca de este
particular lujo mañanero.
Juntos que no revueltos, nos dispusimos a
disfrutar de un bendito café y unos sagrados y templados churros domingueros,
antes de iniciar la gran espantada.
En
este ambiente decadente y de fin de fiesta, antesala de una cantada despedida, un avispado jovenzuelo llamado Ismael intentó
hacer bueno el dicho de “en río revuelto ganancia de pescadores”, y con unos
juegos de habilidad se empeñó en desplumar a todo aquel que se le interpusiera
en su camino.
Este aprendiz de Tahúr con su sonrisa de
pícaro, atesoraba lo que a casi todos nos faltaba a esas horas; sueño,
actitud, vitalidad y sobre todo unas
ganas locas de comerse el mundo y montar
un imperio financiero a nuestra costa.
Representaba
la cara amable de la mañana, y era bien
distinta de la que presentaban destacados tenores nocturnos como Peralta y De Lorecha,
que culpa del sarao nocturno y las alegrías etílicas vagaban como alma en pena,
cumpliendo en tan espléndida mañana triste condena.
GOODBYE
NAVAL
Mi
Teneré, como en la grandes citas no se negó a arrancar, simplemente se tomó un
necesario respiro y opuso resistencia pasiva al exilio que le esperaba en una
prestada y sucia plaza de garaje de Granada.
Su
sonora e insolente falta de respuesta al estímulo de mi excitado dedo en su botón de arranque, ni si quiera pudo ser
compensado por parte del incansable tándem Rider-Santiso
que, en su afán de bajar el
atracón de churros y demostrarme su más que probada y desinteresada amistad, se
dieron un memorable palizón prado arriba, prado abajo empujándola sin descanso.
Fatalmente
tanto esfuerzo y voluntariedad en pos de un fin, no sirvió para nada en el aspecto mecánico, ya
que esta no arrancó, pero si que sirvió
en el apartado humano, para tener muy claro, con quién viajaría al fin del mundo y con quién
no iría ni al tranco de la puerta.
Mientras
el resto del mundo recogía apresuradamente sus bártulos, sin echar muchas
cuentas de las miserias ajenas, y daban
por casi finalizada su estancia en esta agonizante LMR2013, un oportuno
intercambio de fluidos eléctricos desde ese omnipresente Buggy a la
batería de mi infiel compañera la despertó de su coma inducido. Evitándome el
mal trago de tener que volver solo a
casa y con una enferma terminal a
cuestas.
Al
recogerlo todo, después del susto mecánico y al
levantar la vista, descubrimos sin asombro que no éramos “los últimos de Filipinas” pero sí “los
de Navalcán”. Asumiendo con disgusto que,
este maravilloso teatro de los sueños silenciosamente había bajado el telón, hasta
el año próximo.
Poco o nada más vino después: el camino
conocido a Naval, los últimos consejos, algunas risas enlatadas, el bar de la
plaza haciendo su otoñal agosto, unos postreros selfies para el recuerdo y sobre
todo la tristeza del prematuro adiós a los amigos lejanos.
Casi
sin darme cuenta, absorto como estaba en mis pensamientos, recuerdos y pajas
mentales, hice el camino de regreso y cuando la mundialmente conocida silueta de Sierra Nevada me dio la cálida bienvenida supe
que ya estaba en Granada y en casa.
En
ese preciso instante, me juré a mi mismo con los dedos cruzados que, el año
próximo yo egoístamente no repetiría, dejando así la puerta abierta a otros, para que vivan y sientan lo que es estar con Recio............
“LEJOS DEL MUNDANAL RUIDO”.
A vista de pajaro |
![]() |
La plaza del ayuntamiento |
![]() |
En procesion |
![]() |
Encuentro |
![]() |
todo en orden |
![]() |
Beach |
![]() |
Buggytanic |
![]() |
Buggytanic 2 |
![]() |
SuperFerreiro al rescate |
Poblado tendista
Aglomeracion conglomerada
![]() |
Las chicas son guerreras uaaaa |
SuperFerreiro 2
Homenaje a la abuela
![]() |
Infiel! |
![]() |
Las dos abuelas |
![]() |
Malas compañias |
![]() |
El Eden 2 |
![]() |
Idilico |
![]() |
Los 8 Magnificos |
![]() |
Hogueras |
![]() |
Desayuno con......Mc Bauman |
Las abuelas 2 |
![]() |
Empuja maldito |
![]() |
Yaaaaa yaaaaaaaaaaaa |
Hasta siempre
THE
FIN
Joder Mario. Eres la leche. Cuando se me pase la emocion y el recuerdo te escribo algo. Desde hoy hago mio el apodo de tu bautizo. Jeje. Que grande eres tio.
ResponderEliminarQue gusto da leerte y que poco te prodigas escribiendo, cabronazo. Gracias por el relato y si te sirve de incentivo para que realices futuras crónicas, tu saldo cervecero en mi cuenta acaba de aumentar.
ResponderEliminarUn abrazo, Mario
Pobre Mario, en qué fregado te ha metido el archivillano de Juan Recio! Proverbial es su inicuidad, pero esta vez se ha superado. Comida cardioasesina, problemas mecánicos, desastres náuticos, frío polar, noche toledana de rugidos harleystas, una caterva de abuelos Cebolleta contando historias de la puta mili en un descampado… Verdes, las esópicas uvas están muuuuy verdes, yo no quiero ir a este tipo de reuniones ni aunque me paguen!!!
ResponderEliminarA sido un gusto y un placer (nada lascivo por otra parte) volver a leer palabras salidas del corazón, de alguna manera he estado en la LMR2013 porque asi me has hecho sentirlo con tu narrativa, sea en la Morada de esta espléndida pareja gallega, o en papel del wc, sigue escribiendo, coño, y no dejes que las musas, las calvé o las primas te abandonen, se te quiere Peluo.
ResponderEliminar